Abordan el arte del hierro recortado y su relevancia en la religión vudú

Abordan el arte del hierro recortado y su relevancia en la religión vudú

Otro medio en el que se representa a los “loas” y los mitos de la religión vudú haitiana, aunque en un contexto secular, es el arte del hierro cortado, una actividad relativamente joven en Haití pero que deriva de una gran tradición africana sobre la herrería, compartió Raffaela Cedraschi, especialista en África y Oceanía del MNCM, en la cuarta sesión del curso “Una religión llamada vudú”, con el tema “Ogou y el arte del hierro recortado”, el viernes 30 de julio.
La investigadora contextualizó que, en varias partes de África Occidental, los herreros son un grupo dedicado exclusivamente a la metalurgia y son muy importantes y respetados por su capacidad de transformar la materia. Por este atributo transformador, además de fabricar las herramientas de labranza y armas, entre sus funciones se encuentra la elaboración de esculturas y máscaras para el culto y participan en los ritos de iniciación.
Comentó que antes de crear piezas religiosas, los herreros africanos tienen que seguir varias reglas como ayunos, dietas específicas o abstinencia. Además, es común que los miembros de este grupo se unan en matrimonio con las alfareras, también reconocidas como transformadoras de materia.
En Haití, los herreros desempeñan las mismas tareas, aunque de una forma menos ortodoxa: son un grupo diferenciado y respetado, pero no exclusivo, y no están sujetos a rituales estrictos. Se ubican especialmente en la región de Croix-de-Bouquets, al sur de Puerto Príncipe, y han destacado por la elaboración de cruces católicas y vudús* para tumbas y figuras de hierro recortado, probablemente inspirados en la tradición de esculturas de metal de la etnia fon, de Dahomey (actualmente Benín).
Con base en los trabajos del doctor Carlos Alba, investigador del Centro de Estudios Internacionales de El Colegio de México, Raffaela explicó que el arte del hierro recortado (“bos metal”) surgió a mediados del siglo XX, del ingenio del herrero y mecánico haitiano Georges Liautaud, quien abrió una forja en Croix-de-Bouquets, donde desarrolló una nueva técnica para elaborar imágenes en metal. Otros grandes exponentes son Murat Brierre, Gabriel Bien-Aimé y Serge Jolimeau.
Originalmente las figuras de hierro recortado se elaboraban con hierro o cobre, pero al aumentar la demanda y por asequibilidad, se empezó a utilizar lámina de tambos de combustible. Estos se limpian, desarman y estiran, posteriormente sobre las láminas se dibujan los motivos deseados, que se recortan y repujan. Usualmente se representan “loas”, escenas de rituales vudú, pasajes míticos vudú o católicos, y motivos naturales. Estas piezas son artesanías para venta, y ocasionalmente son encargadas para la decoración de templos.
Asimismo, comentó que este arte se asocia con Ogou, el “loa” de la guerra, el fuego, el trueno, el hierro y la metalurgia, tanto en Haití como en algunas regiones de África Occidental. Este espíritu es simbolizado con un machete y su color es el rojo, implementos necesarios para su invocación, además es consorte de la diosa Erzulí, de la belleza y el amor. En el santoral católico es relacionado con Santiago Matamoros, debido a que este se representa portando una espada.
Tiene varias manifestaciones como Ogou Balindjo, una expresión jocosa, ruidosa y poderosa identificada con San Miguel o San Jorge; Ogou Badagri que es violento y bebedor, y pertenece a la nación “petwo” (los “loas” nacidos en Haití, de carácter agresivo); Ogou Shango es benéfico, triunfal y juvenil, representado con San Jorge o Santa Bárbara; Ogou Ge Rouge es viejo, peligroso y maligno, relacionado con San Elías, y como Ogou Feray es el espíritu del hierro, representado por San Martín Caballero.
* En el vudú la cruz simboliza encrucijada y cambio, y se asocia con los “loas” de la muerte (“gédé”) y con Papa Legba, el que abre caminos y da acceso al mundo espiritual.